Teníamos muchas ganas de visitar Alsacia y, la posibilidad de hacer un intercambio de casa, nos ofreció conocer a fondo esta zona del país que limita al este con el gran valle del Rhin y la frontera alemana y suiza. Si estás buscando un destino único, no lo dudes, Alsacia en familia es una opción perfecta.

Las cigüeñas son el símbolo de Alsacia

Hemos viajado mucho por Francia y sabemos que es un país lleno de atractivos. Cada una de sus regiones tiene aspectos singulares y característicos. Viajar por este país es fácil y cómodo. Es un paraíso para los campistas y caravanistas porque hay muchas zonas de acampada y campings. Sus carreteras son preciosas y sus autopistas muy cómodas aunque, la verdad, los peajes son muy caros.

Nos alojamos a pocos kilómetros de Estrasburgo, en Fegersheim. Un pequeño pueblo tranquilo, con sus bonitas casas de tipo alsaciano. Desde aquí, pudimos descubrir la región y también cruzar la frontera para recorrer parte de la Selva Negra. A lo largo del viaje hemos elaborado un mapa de nuestra ruta que podéis ver aquí en detalle.

Han sido casi dos semanas en las que hemos intentado descansar en nuestra bonita casa pero también aprovechar el tiempo al máximo haciendo rutas que no distasen más de 80-100 km de nuestro punto de referencia. En esta entrada os vamos a contar, brevemente, las líneas maestras de estas vacaciones en Alsacia en familia. Esperamos que os guste.

Viñedos en la carretera de camino a Bergheim

El inmenso valle del Rhin domina el paisaje. Los extensos campos de coles para hacer chucrut alsaciano, maiz, vides y tabaco se extienden hasta el horizonte. Desde el Rhin, un entramado de ríos, riachuelos y canales riegan los campos y atraviesan los pueblos y ciudades. Al oeste, se elevan las colinas y las montañas de los Vosgos con su Parc Naturel Régional des Ballons des Vosges.

Son muchos los puntos de interés de Alsacia pero, sin duda, lo más pintoresco y especial se sitúa en la Ruta de los Vinos: una sucesión de pequeños pueblos de gran encanto. Cuando recorremos las autovías del valle es difícil imaginar que a pocos kilómetros, en las colinas, hay pueblos tan bellos y particulares.

Paseando por la Petit France en Estrasburgo

ESTRASBURGO

La capital de la región es un buen punto de partida. Su barrio más característico es la petit France y también el más concurrido por cientos de turistas. Sus casas de colores y entramado de madera con miles de flores se distribuyen por callejuelas y canales. Las esclusas y puentes nos recuerdan la época en la que molinos y todo tipo de maquinaria usaban la fuerza del agua para funcionar.

Pseando junto a los canales de Estrasburgo: Iglesia de Saint Paul

La catedral y su plaza son otro de los puntos de encuentro. Desde allí se pueden recorrer diversos puntos de la ciudad. Una opción interesante es hacer un recorrido por los canales con las barcazas que llevan grupos de turistas o, también, alquilar un barquito junto al Puente Cubierto. ¡Si veís a Alsacia en familia es una de las cosas más típicas que podéis hacer! Justo allí, hay un parque de juegos infantiles perfecto para descansar con los niños.

Flores, canales y casas crean un marco único en Estrasburgo

Al este de la ciudad, en la Esplanade, se están reconvirtiendo antiguos barrios en zonas modernas con centros comerciales y de ocio. Muy cerca de allí está el museo Le Vaisseau. Un museo para aprender jugando sobre diversos aspectos del mundo natural, del cuerpo humano y de diversas ramas de la ciencia. Enfrente está el Parque de la Citadelle con zonas de juegos y de descanso pensado para los habitantes de la ciudad y los que venimos a Alsacia en familia.

En el museo Le Vaisseau de Estrasburgo

¿Qué vas a hacer en Estrasburgo?

Reserva aquí tus actividades

LA RUTA DEL VINO

Al sur de Estrasburgo, bajando por la ribera occidental del valle del río Rhin, se elevan las colinas de viñedos y de pueblecitos «de cuento» que atraen a tantos visitantes cada año. Sus mercadillos en Navidad, sus fiestas en otoño con motivo de la vendimia y la belleza de sus campos en primavera y en verano. Cualquier época del año es perfecta.

Colmar, la Venezia de la Alsacia

Colmar es la ciudad más importante de la región. Es muy famosa por su barrio antiguo y su zona de canales llamada «la pequeña Venezia». Para nosotros demasiados turistas la visitan cada día y puede ser algo agobiante pero, al atardecer, cuando mucha gente ya se ha ido, es un momento perfecto para pasear y cenar una «tarte flambée» con un buen vino.

Bodegas y destilerías ofrecen catas

Mulhouse, al sur de Colmar, es otra ciudad de referencia pero, si preferís los pueblecitos, tenéis decenas entre los que elegir. Todos se parecen pero, a la vez, cada uno tiene sus particularidades. La torre de la iglesia, la torre del reloj, la presencia de las murallas más o menos conservadas, su castillo, la plaza del mercado, sus casas con patio interior… En todos los pueblos váis a encontrar referencias al vino que es el tesoro de la región.

Caminamos por las calles de Bergheim muy temprano. Casi solos. Por eso nos cautivó. Un pueblo tranquilo sin casi visitas. Olía a panadería y a croissants. Delicioso el jardín de plantas medicinales junto a la iglesia. Sus casas bien cuidadas de intensos colores fueron el anuncio de un día memorable.

Ribeauvillé y Riquewihr nos cautivaron como por un flechazo. Aunque había mucha gente paseando por la calle principal, era delicioso detenerse a ver los detalles de cada casa, de las tiendas. Las bodegas, pastelerías y charcuterías rivalizaban con la exposición de sus productos.

Ribeauvillé, preciosas casas y calles engalanadas

Ribeauvillé es conocida por ser la ciudad protectora de los músicos y juglares. Hay muchas esculturas que recuerdan a ellos y que invitan a visitarla la primera semanda de septiembre cuando muchos de ellos vienen a sus fiestas. Después de subir casi hasta el castillo nos detuvimos a comer en el restaurante Aux Trois Châteaux. ¡Qué restaurante! Aunténtica comida alsaciana a precios excelentes y calidad incuestionable.

Los viñedos llegan hasta las puertas de estos pueblos. En Riquewihr, su muralla y sus puertas bien conservadas son uno de los elementos más atractivos. Lo mismo ocurre en Kayserberg que, además, cuenta con un río que acompaña los paseos por sus callejones. Desde allí a Turckheim o Eguesheim para seguir disfrutando de estos pueblos únicos.

Las pastelerías de la Alsacia

¿Qué vas a hacer en Alsacia?

EL CASTILLO DE HAUT-KOENIGSBOURG

Visitar el castillo de Haut-Koenigsbourg es superrecomendable en un viaje a Alsacia en familia. Las vistas del valle del Rhin son magníficas, los bosques que lo rodean ideales para hacer excursiones y el interior del castillo es muy bonito. El territorio alsaciano ha sido lugar de disputas entre las actuales Francia y Alemania durante siglos. Este territorio perteneció al imperio germano y, no fue hasta el Tratado de Versalles, que pasó a formar parte del patrimonio galo.

Subiendo al castillo de Haut Koenigsbourg

Es un castillo restaurado a principios del siglo XX intentando ajustarse a la documentación y a las observaciones arqueológicas exhaustivas que se realizaron durante su recuperación. A Ernest y a Ferran les encantó visitar sus salas, admirar sus muros e imaginar su pasado caballeresco. Acompañados de la audioguía -que no está incluída en el precio de la entrada- fuimos recorriendo entusiasmados esta fortaleza

EL FRENTE ALSACIANO DE LA I GUERRA MUNDIAL

El sitio de Vieil-Armand o Hartmannswillerkopf es lugar de visita imprescindible si quieres conocer una de las etapas más oscuras de la historia europea. La I Guerra Mundial fue un desastre y una vergüenza que dejó decenas de miles de muertos, muchos de ellos en los bosques alsacianos. Aquí os contamos nuestra experiencia.

Entre los campos de viñedos y los Vosgos, los bellos bosques alsacianos ocultan bajo sus árboles, y enredados entre sus raíces, historias de sufrimiento, hambre, frío y muerte, mucha muerte. El sitio de Vieil-Armand nos permite conocer donde estuvo el frente franco-germano durante la I Guerra Mundial. Ambos ejércitos se enfrentaban entre búnquers y trincheras que a penas distaban 25 metros las unas de las otras.

Nuestros hijos recorrieron los corredores poco conscientes de lo que significaban realmente, casi jugando a «una guerra infantil imaginaria». Sin embargo, a nosotros, se nos hizo un nudo en la garganta al descubrir los alambres de espinos enrollados, la ferralla, las trincheras y los búnquers hormigonados. Ha pasado un siglo y todo sigue allí. Algo ha cambiado, eso sí, aquel bosque que la guerra destruyó, ha reverdecido. Los árboles han crecido, los arbustos, los helechos… Los hombres que allí murieron no, pero las semillas de los árboles han logrado restaurar el bosque de antaño.

Cementerio y memorial Hartmannswillerkopf

EL PARQUE DEL PRINCIPITO

Desde que conocimos la existencia de este parque de atracciones tuvimos claro que vendríamos. No es excatamente un parque de atracciones tal y como pensamos en ellos actualmente. Es un lugar de homenaje a la obra del escritor Antoine de Saint-Exupéry y, especialmente, a su libro El Principito. El Parc du Petit Prince es ideal para pasar una jornada tranquila en nuestro viaje a Alsacia en familia. Hay pequeñas atracciones y muchas zonas de juegos para los niños. Además hay un teatro que ofrece varias representaciones cada jornada y un cine con películas diversas, algunas en 3D.

Uno de los globos se eleva en el parque del Principito

Las estrellas del parque son los dos globos aerostáticos que se elevan sobre los jardines pero, además, vas a encontrarte allí con la oveja y la rosa, con los baobás y los volcanes, con el farolero y la noche, con la serpiente… Todos los detalles del cuento están en este parque que incluye zonas de juego libre para que los peques jueguen libremente. Juegos de agua, de equilibrio, para experimentar con los sentidos…

El asteroide y el Principito

EL ECOMUSEO DE ALSACIA

Nos gustan los museos etnográficos e intentamos visitarlos allá donde vamos. Desde Punta Arenas (Chile) a Shelburn (Vermont, Estados Unidos) y, otros muchos, nos gusta reservar alguna jornada para este tipo de espacios. Pasear por el Écomusée d’Alsace es como recorrer un pueblo de esta región de hace unas décadas. Encontramos muchos elementos comunes a los pueblos de otros lugares de Europa y del mundo.

En el ecomuseo se muestran detalles de la vida agrícola

Se han recuperado casas, oficios y tradiciones en un espacio que hace siglos era un lugar destruído por la contaminación generada por una mina de potasio situada muy cerca de aquí. Esta mina cerró en 1975 y, desde entonces, la naturaleza ha ido limpiando y purificando el lugar, reconquistándolo. Después llegó la iniciativa de restaurar una antigua aldea y, poco a poco, el lugar se fue ampliando.

Podemos aprender a ordeñar vacas y conocer los animales propios de las granjas de Alsacia. Comprar dulces y pan en el horno o ver como trabajan los carpinteros. En el aula de la naturaleza nos enseñan las aves, insectos y flora de la región, por ejemplo. La forja, el zapatero, la noria para cortar madera… incluso un taller sobre el método de construcción de las casas en Alsacia.

LAS ESCLUSAS DEL RÍO RHIN

El río Rhin es una vía de comunicación muy importante entre los países y regiones por los que discurre. Impresiona ver los grandes cargueros transportando contenedores, vehículos y materiales. Para regular el caudal fluvial se han construído diversas represas a lo largo del tiempo y, asociadas a ellas, esclusas. Al sur de Estrasburgo, se encuentran las Esclusas de Gerstheim que siempre están en intensa actividad.

Vista general del río Rhin junto a las esclusas

Si vuestros viajes os llevan por la zona, no dejéis de acercaros a ver cómo funciona esta obra de la ingeniería civil. Los grandes barcos pueden salvar allí los desniveles generados por la presa. Es muy interesante aprender el funcionamiento que, en muchas ocasiones hemos visto en maquetas como en Legoland Billund o en Francia en Miniatura. Además, en nuestro viaje por el Canal de Midi, también pudimos utilizarlas con nuestro barco de alquiler.

Un barco se eleva en una de las esclusas del Rhin

¿Te animas a visitar Alsacia en familia? Te aseguramos que no te va a defraudar. Estamos felices de haber dedicado una parte de nuestras vacaciones a este lugar de Francia y, sin duda, sabemos que regresaremos.

Detalle de la fuente del castillo de Haut-Koeninsburg

ALGUNOS CONSEJOS PRÁCTICOS PARA VISITAR ALSACIA EN FAMILIA

  • Puedes convinar tu viaje con unos días en la Selva Negra (Alemania) que está justo al otro lado de la frontera.
  • Para recorrer la región te interesa poner gasolina en Alemania, es mucho más barata.
  • Recuerda que las autopistas francesas cobran un peaje bastante elevado, mientras que en Alemania son gratuítas. Organiza tu ruta teniendo esto en cuenta.
  • Te aconsejamos venir con tu coche o alquilar uno para descubrir mejor la región pero, si lo prefieres, hay transporte público que comunica los pueblos de Alsacia.
  • Dedica al menos una semana pero, si quieres disfrutar con calma, 10 días puede ser perfecto.
  • Si te gustan los parques de atracciones «de verdad», el Europa Park te está esperando. Todas las valoraciones son muy positivas aunque, como suele ser habitual, en agosto está bastante masificado. Nosotros no hemos estado pero volveremos cuando nuestros hijos sean algo mayores. Esta vez hemos preferido las actividades que te hemos explicado.
  • Te pueden interesar los parques de tirolinas y actividades en el bosque como Parc Alsace Adventure o descubrir las minas de plata en Sainte-Marie aux Mines.
  • El clima es perfecto en verano, hace calor y puede llover intensamente algunos días.
  • Para buscar alojamiento te aconsejamos que elijas alguno de los pueblecitos que te hemos indicado. Puedes utilizar Airbnb y Booking si aún no te has animado al intercambio de casa pero… ¿a qué estás esperando?
  • Puedes consultar otros blogs con más información aquí y te recomendamos especialmente Descubriendo Alsacia.

Parque de juegos infantiles en Estrasburgo

Puedes hacer un free-tour con GURUWALK o contratar muchas actividades en CIVITATIS y consultar su web para descubrir ideas y actividades.

¿Ya has estado en Alsacia en familia? ¿viajando con amigos o por libre? ¿Nos lo cuentas? Danos consejos, haznos propuestas y, ya sabes, puedes suscribirte a nuestro blog y también te pueden interesar nuestras experiencias en otros lugares de Europa.

Recuerda, puedes suscribirte a nuestro blog y también vernos en

Y si te gusta, comparte y así nos ayudas a difundir esta información.

Pin It on Pinterest

Share This