En este artículo vamos a seguir contándote nuestra ruta por Namibia y Botsuana de 33 días que realizamos en agosto de 2023. En realidad, también puede plantearse esta parte del viaje como una experiencia independiente para un roadtrip de dos semanas en el que descubrir el norte de Botsuana y la Franja de Caprivi.
En esta ruta podrás disfrutar de espacios naturales junto a los ríos Okavango, Linyanti y el Zambeze que acaba por precipitarse en las Cataratas Victoria. La Franja de Caprivi está formada por una sucesión de cauces fluviales donde encontrar fauna única. Hay múltiples zonas de acampada con servicios excelentes. Atravesarás parques naturales con nombres tan sugerentes como Bwabwata y Salambana que, aunque son menos conocidos que Moremi o Chobe, te aportarán una visión diferente en tu viaje ya que podrás observar ecosistemas asociados a estos ríos más caudalosos: hipopótamos, cocodrilos, águilas pescadoras…
Acabarás este recorrido por los bosques húmedos tropicales en las Cataratas Victoria situadas en la frontera entre Zambia y Zimbabue.
En el sur de este recorrido llegarás a la zona norte del desierto del Kalahari y podrás admirar las extensas llanuras blancas de los salares de Makgadikgadi Pans y Nxai Pan donde viven los enormes baobabs que son capaces de resistir los periodos de extrema sequía. Acampar bajo estos árboles es una experiencia única.
Acabamos nuestro viaje en Maun, la ciudad que recibe a los viajeros que quieren descubrir el Delta del Okavango y adentrarse en el Parque Nacional de Chobe y la reserva de Moremi.
Como os contamos en un artículo anterior, nosotros viajamos con un vehículo 4×4 en el que nos instalaron 2 tiendas superiores. Además llevábamos todo el equipo de acampada. La sensación de confortabilidad y de seguridad nos acompañaron todo el viaje. Si queréis organizar vuestro viaje, también os pueden interesar estos artículos:
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En el siguiente mapa puedes encontrar todos los lugare citados en este artículo así como los alojamientos. Los alojamientos citados están enlazados a Google Maps ya que nos parece mñas práctico a la hora de organizar tu viaje. Sin embargo, si toda esta información te es de utilidad, te agradecemos que utilices nuestro enlace de afiliación a BOOKING, con la pequeña comisión que recibimos ayudas a mantener los gastos que implica el mantenimiento de este blog.
En función de los días de tu viaje puedes adoptar tu ruta por regiones. Todas ellas pueden combinarse de diversas maneras.
¿Cuándo hacer esta ruta por Caprivi y el norte de Botswana?
Nosotros hicimos esta ruta en la segunda quincena del mes de agosto. Esta época del año es ideal para recorrer la Franja de Caprivi y visitar las Cataratas Victoria. Los ríos llevan bastante agua pero no hay mosquitos y puedes sentirte muy cómodo y seguro en las zonas de acampada. En agosto, las temperaturas diurnas son muy agradables y, al anochecer, hay que llevar ropa de abrigo.
Sin embargo, para visitar el Delta del Okavango es ya un poco tarde desde el punto de vista paisajístico porque los humedales están ya muy secos y todo aparece “agostado”, de colores ocres y marrones. Sin embargo, para ver fauna, es un momento ideal pues los animales se concentran en las charcas. Si buscas esas imágenes del delta verde y lleno de meandros serpenteantes, lo mejor es acudir en junio o principios de julio. Eso sí, al haber más agua, también puede que haya zonas inaccesibles en vehículo a las que solo se puede llegar en mokoro o helicóptero.
Finalmente, agosto es el mes perfecto si quieres admirar los salares blancos que se extienden hasta el infinito. Si prefieres observar aves y las migraciones de animales, es mejor hacerlo en abril y mayo cuando aún hay agua en las charcas. Aunque las precipitaciones son escasas, pueden alcanzar los 500 mm/año, se suelen producir en diciembre, enero y febrero, por lo que es a partir de este momento cuando reciben a las aves migratorias que acuden a alimentarse.
Alternativas y más posibilidades para esta ruta
Esta ruta por Namibia y Botswana podría empezar en la capital, Windhoek, subir directamente a Ethosa, si quieres conocer este parque nacional o bien, dirigirte directamente a la Franja de Caprivi ya que en tu viaje por Botswana y el delta del Okavango tendrás también la oportunidad de avistar mucha faena africana y, sin duda, los animales más buscados y especiales: hipopótamos, ñus, elefantes, jirafas, leones y chitas, entre otros muchos.
La ruta por Caprivi y Botswana puede diseñarse como una ruta circular y puedes acceder a Botswana desde Namibia por diferentes zonas:
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RUTA CIRCULAR (2.770 km)
Hacia el norte, dirección Rundu por la B1 y B8. Siguiendo la B8 hacia el oeste atravesarás la Franja de Caprivi para entrar en Botswana por el paso de Ngoma y desde allí hasta Kasane. Un total de 1360 € por una carretera asfaltada y cómoda de transitar.
Desde Kasane nos dirigimos hacia el sur por Hunter’s Road (A33) y en Nata nos dirigimos hacia el oeste atravesando el parque nacional Makgadikgadi Pans por la carretera A3 hasta Maun. Desde Maun, podemos regresar a Windhoek por el paso de Buitepos. La carretera, en general, está asfaltada y es cómoda de transitar aunque en algunos puntos está deteriorada. Un total de 1410 km.
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VARIANTE A35 (de Divundu a Maun: 425 km)
Desde Divundu (200 km al este de Rundu), puedes dirigirte hacia el sur bordeando el delta del Okavango y entrando a Botswana por el control fronterizo de Mohembo. Podrás llegar a Maun pasando por Sehithwa en un trayecto de 425 km. Esta ruta pasa por zonas de interés arqueológico y natural. Según nos dijeron, la carretera está en bastante buen estado, pero no podemos confirmarlo personalmente.
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VARIANTE “SAFARI” (de Ngoma a Maun por Kakoaka: 432 km)
Hemos llamado así a esta ruta que atraviesa el parque nacional de Chobe y la reserva de Moremi en un trayecto de unos 432 km (según Google-Maps necesitarás unas 11 h para realizarlo). Te llevará desde el paso fronterizo de Ngoma a Maun. Sin embargo, es un trayecto imprevisible en el que es imprescindible llevar un vehículo 4×4, agua y alimentos. Conocemos viajeros que lo han hecho y es viable pero requiere un plus de aventura, de adaptabilidad y deberás informarte cada dia sobre el estado de los caminos que depende mucho de la estación y de la cantidad de agua.
Combinando estas dos variantes con la Franja de Caprivi podéis diseñar una ruta triangular de unos 1250 km apta para aventureros que quieren salir de las rutas más trilladas. Si nosotros regresáramos a Botswana o planeásamos un viaje por el norte de este país, nos encantaría hacer esta ruta. Hay que tener en cuenta que en este recorrido váis a encontrar zonas de acampada pero muchas de ellas no están protegidas por lo que se requiere más precaución a la hora de pernoctar. Añadiríamos unos días hacia Makgadikgadi Pans para ver los salares y los baobabs.
Cuando planifiques tu viaje no olvides añadir varios días para descubrir los alrededores de Maun y del delta del Okavango.
Ahora sí, empezamos a contarte nuestra ruta en un viaje alucinante y precioso. Una ruta inolvidable.
RUTA POR NAMIBIA: FRANJA DE CAPRIVI
Día 20. RUNDU – DIVUNDU (200 km)
Hemos llegado a Rundu desde Ethosa. Aquí hemos pasado una noche en un hostal y seguimos la ruta. Aunque muchos viajeros atraviesan rápidamente la Franja de Caprivi para llegar rápidamente a Kasane con el único objetivo de alcanzar las Cataratas Victoria, a nosotros nos apetecía pasar unos días en esta región. La carretera B8 está totalmente asfaltada así que viajamos rápidamente y sin polvo.
El viaje es monótono pero muy bonito. Los poblados y asentamientos se suceden. Son grupos de casas circulares con un cercado alrededor. Hay muchos niños y niñas que van cargados con bidones de agua. Vemos las fuentes donde llenan los recipientes donde se reúnen los vecinos y conversan. Los críos nos saludan todo el tiempo alzando los brazos y mostrando inmensas sonrisas.
Llegamos a nuestro alojamiento en Divundu, White Sands, y nos alojamos en la parcela n°1 que es perfecta. Tiene un mirador enorme para observar las cataratas Popu, Popu Falls. Una parte de la parcela está cubierta de grama verde, hay un baño privado y una zona de cocina con una buena sombra. ¡Nos encanta!.
Esta tarde hemos contratado una navegación por el río Kovango para ver hipopótamos y cocodrilos. Admirar estos animales en libertad mientras se produce la puesta de sol ha sido increíble. Regresamos encantados a nuestra zona de acampada, encendemos fuego, hacemos una barbacoa y cenamos mientras comentamos todas las vivencias de la jornada.
Alojamiento: White Sands y hay otras alternativas como Ngepi Camp y Emms Cubango
Día 21. DIVUNDU – KONGOLA (200 km)
No apetece nada irse de White Sands. Hemos dormido de maravilla y, al menos aparentemente, no hemos tenido visita nocturna de hipopótamos. Pocos kilómetros al este del camping hay un museo viviente de una comunidad San y decidimos visitarla. El Khwe Living Museum es una fundación que intenta preservar los valores culturales de la comunidad san. Pasamos más de una hora con ellos y antes de despedirnos cantan y bailan diversas danzas tradicionales.
Seguimos nuestro viaje. La carretera atraviesa kilómetros y kilómetros de bosque que ha sido quemado, probablemente el año pasado. Da pena ver todo así. Incluso los poblados fueron quemados y han vuelto a hacer algunas chozas. Algunas personas viven en tiendas de campaña en medio del mató quemado.
Nos acercamos a Kongola y tomamos el. desvío de entrada al Parque Nacional Bwabwata. Este parque fue establecido en 2007 y es importante porque es utilizado como ruta migratoria por los elefantes desde Botswana a Angola. Nuestro camping está asociado al Nambwa Tented Lodge. ¡No ha sido nada fácil llegar por estos caminos de arena! Nuestra parcela está muy bien acondicionada. Eso sí, no hay ninguna valla ni protección, estamos en contacto directo con la naturaleza, por lo que al anochecer hay que estar ya en el campamento, encender fuego y no alejarse.
Pasamos la tarde admirando elefantes, hipopótamos, cocodrilos, kudus y babuinos…
Alojamiento: Nambwa Tented Lodge (el lodge es maravilloso… pero nosotros no nos lo podemos permitir y disfrutamos de la acampada)
Día 22. KONGOLA – KASANE (232 km)
Para llegar a Kasane desde Kongola hay dos alternativas: nosotros continuamos por la B8 que es la carretera más rápida y cómoda. Sin embargo, si hubiéramos tenido más tiempo, hubiéramos optado por la variante de la C49 y hubiéramos pasado una noche más en la zona de Sangwali y Matemwa.
Tras un agradable desayuno, vamos recogiendo las tiendas mientras sube el sol y poco a poco suben las temperaturas. La familia de hipopótamos está ahora dándose un baño en la laguna. Realmente, si volviéramos, creo que nos quedaríamos más días en este lugar. Llegar hasta aquí no es nada sencillo y merece la pena pernoctar más noches.
Pasamos el control de aduana entre Namibia y Botswana. No me gustan nada estos momentos, siempre tengo la sensación de que a algún funcionario o militar se le pueden cruzar los cables. Pero, todo transcurre en calma, hay que revisar la comida y productos frescos, desinfectar los vehículos y zapatos y hay que pagar una tasa por el vehículo. Nos piden la autorización de la agencia de alquiler para pasar los coches y, también, el certificado de la traducción literal de la partida de nacimiento de nuestros hijos.
Llegamos a Senyati Safari Campsite, al sur de Kasane, nos instalamos y pasamos la tarde relajados disfrutando de las instalaciones y de la terraza del bar con vistas a una charca en la que vienen a beber los elefantes.
Alojamiento: Senyati Safari Camp
Día 23. KASANE – CATARATAS VICTORIA – KASANE (82+82 km)
Para visitar las Cataratas Victoria hemos contratado el transporte para los 6. Hemos optado por esta opción para no tener que hacer las gestiones del paso de la aduana de los dos coches y para evitarnos pagar la tasa del vehículo. Además, así, les damos descanso a los conductores.
Vamos a hacer 82 km para ir desde Kasane a las cataratas en una furgoneta para 12 personas y se cobran el transporte bien caro. Nos parece excesivo pero es lo que tiene visitar unos de los parajes naturales más impresionantes de África. Cruzar de Botsuana a Zimbabue ha sido sencillo. Hemos tenido que pagar 30 USD por la visa de turista de un día. En efectivo, importe exacto y con billetes posteriores a 2017, si no los llevas, no pagas. También se puede pagar en euros.
Para acceder al recinto de las cataratas, los extranjeros pagamos 50 USD ¡por poco me muero! Es un abuso, la verdad, para una visita que dura unas 2 horas. Pero disfrutamos de lo lindo y, después, nos vamos paseando a comer en The Lookout Cafe, el mejor sitio para admirar el cañón del río Zambeze.
Día 24. KASANE
Hoy nos hemos tomado el día de descanso y hemos declarado la jornada «el día del chófer». Hemos lavado ropa, limpiado los coches, organizado el equipaje, lectura y también escrito los diarios mientras íbamos y veníamos al mirador de la laguna a ver los animales que se acercaban. Ya hemos hecho más de 5000 km y estoy muy orgullosa de todos nosotros.
Si venís a Kasane podéis contratar muchas actividades, hacer navegación por el río y salir de safari. Como nosotros ya hemos disfrutado de todo esto en nuestra ruta y aún tenemos que ir al Okavango, hemos preferido descansar.
ROADTRIP POR BOTSUANA: ZONA NORTE
Día 25. KASANE – ELEPHANTS SAND (255 km)
Volvemos a la carretera después del día de descanso de ayer. Recorremos la A3 o Hunter’s Road que conecta Kasane con Nata. Esta carretera discurre casi paralela a la frontera con Zimbabwe y tiene mucho tráfico de camiones. Atravesamos extensas zonas de agricultura intensiva. Grandes cosechadoras están trabajando en los inmensos campos de color amarillo. También hay grandes silos de almacenamiento de grano junto a la carretera.
De vez en cuando vemos animales en la cuneta o un poco más allá. No deja de sorprendernos. Grupos de monos, elefantes, jirafas… Es increíble. Algunos grandes baobabs destacan entre los árboles y arbustos del entorno.
Nuestra zona de acampada en Elephant Sands no tiene ni una sombra. Las parcelas no tienen tampoco electricidad. Estamos muy a gusto porque nos adaptamos a todo y somos un gran equipo pero, comparado con otros lugares que hemos estado, esta zona de acampada es muy básica y bastante cara. Me decepciona este lugar, quizá porque me había creado grandes expectativas. Grupos de viajeros de algunas agencias toman cervezas en la terraza mientras comentan las experiencias del día. Otros descansan en la terraza de los chalets del lodge que rodean la laguna que ahora está seca.
El principal reclamo de este alojamiento es su mirador para ver elefantes. Pero, a nosotros, no nos gusta. Después de ver a los elefantes en libertad y respetando siempre una distancia para proteger su modo de vida y autonomía, verles aquí tan cerca del restaurante y tan amontonados. Además, el olor es muy molesto. Estamos en agosto, la laguna está seca y solo tienen un surtidor para beber y se amontonan todos a su alrededor, discutiendo y compitiendo por acceder. Son un grupo enorme de machos que beben frente a los turistas que están en el mirador y casi les pueden tocar. Los elefantes, si quisieran, alargando sus trompas nos podrían tocar.
Pasamos la tarde tranquilos – inmersos por el intenso olor a excrementos de los elefantes – y nos vamos a cenar a nuestra precaria zona de acampada acompañados por una hoguera y el cielo estrellado. De vez en cuando un elefante pasa por el campamento, impresiona de verdad ver a estos enormes animales caminando con parsimonia entre las tiendas en plena libertad.
Alojamiento: Elephant Sands
Día 26. ELEPHANTS SAND (NATA) – PLANET BAOBAB (GWETA) (151 km)
Seguimos nuestra ruta hacia Maun. El recorrido es bastante monótono. Comentamos que, si volviéramos aquí, habríamos viajado directamente hasta Gweta o bien, hubiéramos optado por atravesar el Parque Nacional Chobe por Kakoaka hasta Maun.
Tras repostar en Nata, seguimos la ruta hacia el oeste y llegamos a Gweta. La carretera delimita la concesión de caza CT1 al norte y, al sur, el Parque Nacional Makgadikgadi Pans que incluye los grandes salares del norte del desierto del Kalahari. Es zona de grandes migraciones de fauna y, los salares, son lugar de descanso de miles de aves cuando están cargados de agua tras las lluvias que caen de diciembre a febrero.
Llegamos a nuestro alojamiento, Planet Baobab, y nos enamoramos desde el primer momento. El lugar está situado en un emplazamiento con varios gigantescos baobabs. Son bestiales. ¡Cómo me gustaría poder verlos con hojas tras las lluvias!.
Montamos nuestro campamento, nos damos un baño en la piscina y nos relajamos brevemente mientras vemos caer el sol. El cielo estrellado y la Vía Láctea nos acompañan una noche más.
Alojamiento: Planet Baobab
Día 27. PLANET BAOBAB – NWETWE PAN – PLANET BAOBAB (120 km)
Decidimos alojarnos aquí para poder ver y disfrutar de los baobabs, estos enormes árboles que son verdaderos monumentos naturales. Situarse junto a ellos sobrecoge y genera una sensación de respeto inigualable. Además, desde aquí puedes recorrer el Parque Nacional Makgadikgadi Pan y los salares de Nwetwe, Gutsa y Sowa.
Al llegar, valoramos la opción de contratar una excursión guiada para ver suricatas. Pero nos cobraban 100 $/persona (50$ los niños, nos cobraban ese precio por nuestro hijo pequeño aunque ya tenía 12 años) y se nos iba de presupuesto. Además, al explicarnos la actividad con los suricatas no nos gustó. Nos pareció que, en realidad, se visita una colonia de animales que están siendo alimentados. Y esto no nos apetecía en absoluto pues no es correcto.
Finalmente, decidimos hacer el recorrido por libre y dejar que la providencia decida. Si vemos suricatas bien y, si no los vemos, también. Así pues, nos hemos levantado muy temprano y nos hemos dirigido hacia los salares.
No es fácil moverse por aquí porque a veces los caminos no están bien marcados y, en un par de ocasiones, pensábamos habernos perdido. Hemos visto enormes baobabs y hemos llegado hasta Gabasadi Island. Este montículo está en medio del Nwetwe Pan. Es increíble moverse sobre las costras de este salar y no divisar nada más que una línea blanca en el horizonte que te rodea por todas partes. Sin una ubicación por GPS o una brújula sería muy fácil perderse, especialmente en un día nublado. La visión nos ha fascinado.
Teníamos ilusión de poder haber visto alguna familia de suricatas en la zona pero no ha habido suerte. Y no pasa nada, los animales son libres y queremos que lo sigan siendo. Ya interferimos bastante en el entorno con carreteras, vallados, turismo, caza… como para querer que nos estén esperando donde a nosotros nos interesa ¡no es necesario! Esto forma parte del viaje.
Alojamiento: Planet Baobab
Día 28. PLANET BAOBAB (GWETA) – BAINES BAOBAB – MAUN (290 km)
Dejamos Gweta recorriendo la carretera A3 bordeando los salares del norte del Kalahari. Nos detenemos en la entrada del Nxai Pan National Park y hacemos el registro. Queremos llegar hasta los Baobas de Baines. Llegar hasta allí supone 25 km de pista de arena y muchos baches. Finalmente llegamos a la laguna salada que está totalmente seca. La superficie es plana y blanca ¡es una maravilla conducir sobre ella! El desplazamiento es suave y agradable.
A lo lejos se divisan los 6 enormes baobabs, uno de ellos está tumbado, caído en el suelo junto a sus hermanas. Les llaman también «the six sisters«. Ahora están totalmente secas, sin hojas. Son monumentos magníficos. Nos encantaría verlos cuando tienen sus hojas.
Si vienes hasta aquí, has de saber que es posible acampar junto a los baobabs y pasar la noche. Debe ser una experiencia única observar aquí el amanecer y el ocaso. Y ver el cielo estrellado acompañada por estos enormes seres vivos.
Nuestra jornada continúa por la tarde y llegamos a Maun. Tras hacer la compra y tomar una deliciosa comida en The Duck Café, nos instalamos en nuestro alojamiento y nos preparamos para disfrutar de los últimos días del viaje.
Alojamiento: Sitatunga Camp
Día 29. MAUN – MOREMI GAME RESERVE – MAUN (200 km)
Hoy nos ha tocado levantarnos bien temprano para aprovechar el día al máximo. Habíamos contratado una excursión con guía en un game viewer por la reserva de Moremi. Como nuestro alojamiento está al sur de Maun hemos necesitado casi dos horas para llegar a la puerta de la reserva. Si volviéramos a Maun tengo muy claro que buscaría un alojamiento al norte de Maun, lo más cerca posible del acceso a Moremi y Chobe.
Al ir en un vehículo abierto nos hemos tenido que abrigar mucho y nos han dado mantas para taparnos. Eran las 5 de la mañana cuando hemos salido de Sitatunga Campsite y hacía buena temperatura pero en el traslado hemos tenido que tapar os bien.
Antes de entrar al parque, nuestro guía nos ha ofrecido un desayuno muy rico y completo. Hemos hecho el registro y hemos entrado
Alojamiento: Sitatunga Camp
Tras nuestra experiencia, te proponemos que busques alternativas más al norte de Maun, cuanto más cerca de la puerta sur de Moremi, mejor. Por ejemplo, nosotros optaríamos por alguno como Island Safari Lodge. O aún más al norte. Estuvimos muy cómodos en Sitatunga Camp pero está muy alejado de los puntos de interés y los desplazamientos se hacen eternos. Si quieres visitar el delta, navegar en mokoro o pasar algún día en Moremi, no lo dudes, alójate al norte de Maun. Hay muchas opciones para todos los presupuestos.
Día 30. MAUN – DELTA DEL OKAVANGO – MAUN (70 km)
Nuevamente contratamos una actividad en nuestro alojamiento para ir a navegar en mokoro por el delta del Okavango. Nos ofrecen combinarlo con el vuelo en helicóptero y decidimos aceptar. Nos habían cancelado una reserva que teníamos hecha desde España para volar en avioneta con Major Blue Air y nos pareció una buena alternativa combinar ambas actividades para ahorrarnos tantos desplazamientos.
Navegar en mokoro es una delicia. Nos gustó mucho la actividad y la comida que nos prepararon de picnic estaba genial pero, la verdad, es carísima. Si vas al delta es normal que quieras tener esta experiencia pero los precios son excesivos.
Por la tarde hemos volado en helicóptero con un piloto magnífico y hemos disfrutado como niños. Quince minutos alucinantes pudiendo admirar el Okavango y toda su fauna desde el aire. La maniobrabilidad del aparato, la sensación de seguridad y el piloto nos han permitido llevarnos un recuerdo único.
Alojamiento: Sitatunga Camp
Día 31. MAUN
Hoy no nos hemos movido del Sitatunga Camp. Nos hemos dedicado a descansar una parte del día, a leer, darnos un baño en la piscina y tomar una cerveza. Además hemos limpiado y organizado los coches para que estén listos para el día de la devolución. Además hemos preparado el equipaje y separado algo de ropa que vamos a dejar en una escuelita que hay junto a la carretera de acceso. El viaje llega a su fin.
Día 32. MAUN – GOBABIS (600 km)
El regreso es cómodo y rápido. Los paisajes llanos de Botsuana van dando paso a las colinas de Namibia. Cruzamos la frontera por el paso de Buitepo sin ningún contratiempo y llegamos a Gobabis. Una ciudad tranquila cuya economía se basa en la ganadería. Nuestro alojamiento es un lugar delicioso, tranquilo y disfrutamos de la calma y una buena ducha. Tras tantos días en ruta, estas camas de colchones perfectos y suaves sábanas nos parecen un lujazo.
Alojamiento: Gobabis Guesthouse
Día 33. GOBABIS – WINDHOEK (205 km)
Desde Gobabis ya sólo nos quedan 200 kilómetros para regresar a Windhoek. Ha sido bonito hacer el recorrido por la carretera y reencontrarnos con el paisaje namibio. Es sutil pero hay diferencias con Botswana. El paisaje es más montañoso a medida que avanzamos, las granjas de ganado ocupan el territorio y el color anaranjado de la tierra contrasta con el color ocre de las hierbas secas.
Tras hacer las gestiones en la agencia de alquiler de coches, nos llevan nuestro hotel. Volvemos al lugar en el que empezamos este largo viaje hace 33 días. Por la tarde salimos a dar un paseo por la ciudad y nos encanta el ambiente que encontramos. Cuando llegamos la otra vez, era domingo por la tarde y la ciudad estaba medio vacía. Pero hoy, viernes, hay mucha gente, las tiendas están abiertas y son preciosas.
Acabamos en el Craft Café. Una cafetería preciosa situada en un mercado de artesanía. Es un lugar muy acogedor, con muchas tiendas de artesanos locales y asociaciones del país. Antes de regresar al hostal pasamos por el Museo de la Ciudad de Windhoek -que no merece la pena- y subimos al mirador del Museo de la Independencia para admirar las vistas de la ciudad. Este museo sí que tiene una exposición interesante sobre la historia de Namibia. Este joven país tiene un pasado duro de colonialismo, explotación y esclavitud. Aún hay muchas diferencias sociales y muchas personas viven en la pobreza, pero no hay duda de que se está avanzando.
Día 34. WINDHOEK Y REGRESO A CASA
Pasamos la mañana recorriendo el centro de Windhoek mientras comentamos algunos de los mejores momentos de este viaje y regresamos a comer a nuestro alojamiento. Por la tarde, viene a recogernos el chófer de Africa on Wheels – la empresa con quien alquilamos el vehículo 4×4 – ya que su servicio incluye los transportes al alojamiento y al aeropuerto a la llegada y a la ida ¡es perfecto no tener que pensar en esto!.
Tengo un ilusionante sentido de la vida. Estoy convencida de que las personas podemos cambiar el mundo trabajando personal y localmente a través de proyecto colaborativos. Me gusta compartir con mi familia experiencias motivadoras y enriquecedoras. Y difundir algunas de ellas en este blog sobre «nuestro viaje por la vida».
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