Alemania, como cualquier país, requiere mucho tiempo para ser recorrido y conocido. En nuestro viaje de verano del 2018 pasamos varias semanas en Suiza, en Francia y, también, nos animamos a conocer el suroeste de Alemania con niños. Nuestro objetivo inicial era ir al Playmobil FunPark que hay junto a la ciudad de Nuremberg y, a nuestro regreso, pasar unos días en la Selva Negra. Pero como siempre, a medida que investigábamos un poco, íbamos descubriendo lugares atractivos de gran interés.

Un objetivo de este viaje era llevar a nuestros hijos al Playmobil FunPark

NUREMBERG: LA CIUDAD MEDIEVAL LLENA DE HISTORIA

Nuremberg es una ciudad increíble. Llena de historia, de monumentos, de edificios preciosos y de una historia sorprendente. Su pasado ha dejado testimonios en ella de momentos gloriosos pero también muy dolorosos. Es una ciudad deslumbrante que nos encantó y que nos encantó descubrir en nuestro viaje a Alemania con niños.

Vistas de la ciudad de Nuremberg desde el castillo

Recorrer sus murallas, visitar las torres y sus iglesias. Todo es precioso. Su barrio antiguo está lleno de vida y en sus plazas hay terrazas con mucha gente que toma una cerveza, un refresco o un helado. Cada rincón esconde un secreto. Las gárgolas de sus iglesias, los escudos de los edificios, las fuentes… Hay que tener en cuenta que esta ciudad fue totalmente arrasada por los bombardeos aliados entre los años 1943-45 por lo que, lo que váis a ver, se ha recuperado gracias a la reconstrucción tras la segunda guerra mundial. En muchos de sus edificios hay testimonio de aquel desastre que hacen reflexionar al visitante.

Recorriendo la ciudad de Nuremberg de camino al castillo

Dedicamos uno de los días en Nuremberg al Playmobil Fun Park tal y como era nuestro objetivo inicial. Hemos de decidir que nos sorprendió pues íbamos con la idea de visitar un parque de atracciones pero no lo es. El Playmobil FunPark de Zirndorf es en realidad un gran parque de juegos infantiles. No dejéis de visitarlo si váis a Alemania con niños. Todo está pensado para que los más pequeños de la familia jueguen y disfruten. Jugar y jugar. No hay ninguna máquina, todo se activa manualmente y está pensado para niños y niñas de todas las edades. La entrada es bastante económica si comparáis con otros parques precisamente por eso.

Nos hicimos decenas de fotos con los playmobils gigantes

Antes de dejar la ciudad, decidimos pasar una mañana conociendo las entrañas del Centro de Documentación del Partido Nacionalsocialista en Nuremberg. Nos planteamos si merecía la pena visitar este lugar con Ernest y Ferran. Tras la visita, podemos confirmar que sí. Es admirable cómo han sabido redefinir este lugar para utilizarlo para dar a conocer la historia del nacionalsocialismo, su vinculación con la ciudad de Nuremberg y el horror del nazismo. Visitar este lugar es una gran lección de historia y de cómo no debemos dejar de contar nuestra propia historia.

Ferran con su audioguía conociendo un poco de la historia de Europa

BADEN BADEN: LA CIUDAD COQUETA Y ELEGANTE

Baden Baden nos pareció una ciudad un poco seria y aburrida… Quizá porque era pleno mes de agosto y la mayor parte de sus habitantes estaban fuera por vacaciones. Quién sabe. Lo cierto es que nos pareció demasiado clasista. Es una bonita ciudad, muy coqueta y elegante. Con bonitos edificios y jardines. Tiendas de moda carísimas y casinos en los que jugar nuestro dinero. Por supuesto es conocida por sus famosos balnearios.

«Baden Baden: the good good life»

Pasamos una tarde paseando por ella y aprovechamos para degustar una deliciosa merienda en la famosa pastelería cafetería König. Los pasteles Selva Negra son famosos en la región pero cualquier dulce de crema y frutas, chocolate o frutos secos os sorprenderá. Así como los cafés.

Merendando en la Cafetería Köning de Badeb Baden

Pero Baden Baden es importante también por ser la puerta de entrada a la Selva Negra desde el norte de Alemania. Por ese motivo estábamos nosotros allí. Desde Baden Baden tomamos la conocida carretera B500 o carretera de la Selva Negra (Schwarzwaldhochstrasse) para seguir nuestro itinerario por el suroeste de Alemania con niños.

LA SELVA NEGRA

Nuestro centro de operaciones para visitar el suroeste de Alemania con niños no estaba en la Selva Negra, sino al otro lado de la frontera en Francia, en un pequeño pueblecito al sur de Estrasburgo. Las regiones de ambos países están íntimamente relacionadas por su historia y su cultura y es muy fácil recorrer ambas zonas y disfrutar de sus magníficas montañas, de sus pueblecitos y sus atractivos turísticos.

Ruinas de la abadía de Allerheiligen

Como os decía, recorrer la carretera B500 es una de las mejores opciones para disfrutar de los magnífcos bosques de abetos de la Selva Negra. Sin embargo, no dudéis en salir de ella y divagar por otras carreteras secundarias. La Selva Negra es una región muy turística que es visitada por los habitantes del norte de Europa por su clima cálido y benigno -comparado con el clima más septentrional- y, cada día, por más turistas del resto del mundo. Es por ello que, si os alejáis de los puntos más turísticos váis a tener una vivencia más real de la Selva Negra.

Algunas de las rutas que hicimos por los senderos de la Selva Negra los registramos en Sports-tracker. Podéis ver aquí el recorrido detallado:

En la Selva Negra váis a encontrar lagos en los que practicar deportes náuticos o en los que jugar y bañaros. Senderos para disfrutar de los bosques. Ríos y cascadas. Pequeños pueblos de tejados de madera con preciosas zonas de juegos infantiles y parques de aventuras en el bosque como Kletterwald en Feldberg. Además, quizá os puede interesar también visitar museos como el Museo al Aire Libre de la Selva Negra y no olvidéis llevar a vuestros hijos a alguno de los increíbles toboganes de montaña: ¡les encantará!.

Los lagos Mummelsee, Wildsee, Buhlbachsee o el Schluchsee son otro de los atractivos de la Selva Negra. Cascadas muy famosas como la de Todtnau, Edelfrauengrab, Zweribach, Allerheiligen y Triberg. Nosotros teníamos intención de pasar una mañana en Triberg y visitar su cascada, pero decidimos no quedarnos cuando comprobamos que el pueblo estaba abarrotado de gente y que para ver la cascada era necesario pagar para acceder al sendero del bosque. Después subimos que por la tarde, a partir de las 18 h, es gratuíto.

Recorriendo las carreteras de la Selva Negra encontraréis un montón de ciudades y pueblos que os cautivarán: Schiltach, Freudenstadt, Offenburg, Oberkirch, Oppenau, St. Märgen y St. Peter, Wolfach, Gengenbach, Lautenbach, Heidelberg, Villingen…  Nosotros no estuvimos bastante tiempo para visitarlos todos pues sólo estuvimos 3 jornadas completas allí. Sin embargo, os aconsejamos planificar vuestra ruta sin prisas y disfrutar de alguna zona dedicando un tiempo a pasear por los bosques y disfrutar de los lagos.

El gran reloj a las afueras de Triberg es parada obligatoria

Entre los Alpes y Alsacia, esta región se caracteriza por sus bosques de abetos, sus montañas y valles poco poblados aunque cercanos a ciudades grandes. Es una región con estaciones de esquí y bonitos senderos para disfrutar de los bosques en verano. Algunos puntos destacables son Herzogenhorn y Feldberg que es la cumbre más elevada de la Selva Negra a la que se puede subir en telecabina. Un buen plan si viajáis a Alemania con niños.

FRIBURGO DE BRISGOVIA

Aunque su bandera coincide con la de Inglaterra, esta ciudad está situada al sur de Alemania cerca de las fronteras con Suiza y Alemania. Muchas veces se la confunde con su homónima, la Friburgo de Suiza pero son ciudades distintas. En nuestro viaje visitamos ambos ciudades y pronto os contaremos detalles de ambos experiencias.

Friburgo es una ciudad preciosa. Sus comercios, sus restaurantes y bares, su actividad cultural, sus calles comerciales, su catedral… Todo invita a quedarse. Los tranvias recorren la ciudad y el barrio antiguo que está, en gran parte, amurallado. Las puertas de acceso con sus torres son uno de sus mayores atractivos. Además, una curiosidad, los pequeños canales que recorren la ciudad durante el día se llenan de agua limpia para refrescar el ambiente y a quien quiera remojarse los pies.

La puerta de San Martin y los canales de agua

¿Qué hicimos en Friburgo? Pasear y pasear, sentarnos y descansar. Disfrutar de la ciudad sin prisas y desear tener más tiempo para conocerla a fondo. En este recorrido de verano nos centramos en Alsacia y nos faltó tiempo para la Selva Negra, es la verdad. Pero deseamos volver ¿quizá en Navidad? Sí, en invierno es un momento también ideal para disfrutar del ambiento navideño. También en Semana Santa cuando se celebra la Pascua y todo se decora pensando en esta bonita festividad.

Aquí termina nuestro primer artículo sobre nuestro viaje a Alemania con niños en nuestro blog. Esperamos poder seguir contando detalles próximamente.

Recuerda, puedes suscribirte a nuestro blog y también vernos en

Y si te gusta, comparte y así nos ayudas a difundir esta información.

Pin It on Pinterest

Share This